Tu Amigo Informativo: JESÚS SÁNCHEZ: DECANO DEL PERIODISMO EN EL VIGÍA

fuente: Diario Los Andes

Escrito por: Eudes J. Blanco P.-

“Yo nací un 31 de enero del año 1937 en La Cuchilla del Niño, aldea San Pedro, municipio Zea, distrito Tovar del estado Mérida”, así se expresa con orgullo Jesús Antonio Sánchez Guerrero, cuando se refiere a la vivencia de sus 78 años de vida.

Nació en el humilde hogar campesino del zedeño Olinto Sánchez y la gritense Juana Sebastiana Guerrero. Cursó el primer grado de la educación primaria en La Cuchilla del Niño, el segundo y tercer grado en la población de Zea, el cuarto lo realiza en La Tendida, donde se trasladaron sus padres en búsqueda de mejores condiciones de vida; el quinto y sexto grado lo realiza en la Escuela Graduada Mauricio Encinoso de El Vigía, donde se residencian sus padres en 1957. Su educación secundaria la realiza en el Liceo Alberto Adriani, donde egresa como bachiller en 1964.

El periodista

Se inició como reportero haciendo notas de prensa sobre los acontecimiento de El Vigía que le fueron publicados por la emisora Ondas del Escalante, de Santa Bárbara del Zulia y que luego fueron extendidas al semanario Libertad, de San Cristóbal. Su actividad adquiere formalidad cuando ingresa como reportero de Ondas Panamericanas Radio, siendo el fundador de su Noticiero Panamericano. Igualmente realiza periodismo en el primer semanario de El Vigía: El Progreso, convirtiéndose así en la primera persona habitante del municipio Alberto Adriani, que desarrollo de manera sistemática la actividad periodística.

Durante 46 años desempeñó la labor periodística. Además de la experiencia en la radio y la prensa local, que se expresan en su presencia en: Ondas Panamericanas Radio, Concierto 96.5, Acción 104.5, semanario El progreso, Diario Vamos y Diario Vigía, hay que destacar un excelente trabajo en la prensa regional: Crítica, Diario de Occidente y Panorama de Maracaibo; La Nación de San Cristóbal; Diario El Tiempo de Valera, El Vigilante, Frontera, y Diario de Los Andes de Mérida, a lo que se suma, luego de colegiado el trabajo realizado como reportero en el diario El Universal de Caracas. Su última actividad en el campo periodístico fue en el ámbito institucional al haber sido el jefe de Prensa de la Alcaldía del municipio Alberto Adriani, en las gestiones de los alcaldes Abelardo Pernía y Luis Rojas.

Hay que destacar que se inscribió en un curso de periodismo para reporteros en servicio no profesionales, que dictaba la Universidad Santa María, auspiciado por la Universidad Central de Venezuela, bajo la modalidad mixta: distancia y presencial. Las evaluaciones y entrega de material se realizaban los fines de semana en San Cristóbal. Concurrió por dos años al mismo, pero las dificultades del traslado, no le permitieron culminar. Este curso aunado a su experiencia laboral, le permitieron la colegialización luego de aprobada la Ley del Ejercicio del Periodismo en 1972, gremio del cual es cofundador en la seccional de Mérida.

Sus cuatro décadas de experiencia periodística, lo llevan a recomendar a las nuevas generaciones de periodistas: que las ventajas tecnológicas no deben hacer de ellos unos conformistas, hay que salir de las comodidades de las oficinas “…vayan al sitio del suceso y traten de hacer la noticia lo mejor que pueda, dar el detalle necesario, para dar satisfacción al público oyente o lector, que siempre está ávido del saber noticioso. ¡Hay que vivir la noticia!”.

Serenatas y poesía

Otra faceta que identifica a Jesús Sánchez es la poesía. El origen a esta afición, hay que buscarla en su inclinación a la música y en la influencia que ejerció su coterráneo Tito Lino Molina, considerado el poeta popular de la aldea El Vigía.

Cuando llegó a El Vigía, con 20 años de edad, refiere que “…yo comencé a sentirme solo, no tenía conocidos, ni amigos”, pero como aficionado a la guitarra se interesó por averiguar quién tenía esa misma inclinación y establece contacto y relación de amistad, producto de la parranda, con Tito Lino Molina, poeta irreverente escritor de décimas. Con él, mejora la ejecución de la guitarra e inicia un periplo como serenatero.

Al observar la habilidad de Tito Lino para improvisar y escribir décimas, se dijo: “Creo que yo también puedo hacer eso”, y empieza a escribir décimas también. Su primera producción de este tipo “Los peligros del DDT”, lo llevó a la cárcel, fue trasladado por la Seguridad Nacional, para ser investigado a la ciudad de Trujillo.

Posteriormente incursiona en el campo de la poesía lírica, como un espacio para desahogar sus sentimientos amorosos. Estos poemas, empezaron a ser publicados en los periódicos en los que laboraba, por ello es que sus primeros poemas estén insertos en el semanario El Progreso.

Noche Lírica

Otra manifestación vinculada a su producción poética es el programa radial Noche Lírica, el cual mantuvo ininterrumpidamente por 39 años, desde 1975 hasta diciembre de 2014, que tomó la decisión de retirarse de su actividad en la radio.

Inició este programa en Ondas Panamericanas Radio; reconoce que el origen del mismo se debe a una idea del experimentado locutor Baudilio Meneses Velázquez, quien al regalarle un “Long Play” del trío Los Panchos, le sugirió la posibilidad de un programa en donde a esa música romántica fuera acompañada por un verso vinculado al tema musical. La idea maduró y se cristalizó y el programa tuvo presencia además de Ondas Panamericanas en Concierto 96.5, Acción 104.5, Soberana Stereo y en Alegría 106.5.

Su experiencia poética escrita y en la radio a través del programa noche lírica, le ha proporcionado una enseñanza de vida que se traduce en “…un aprendizaje bastante profundo, que me llevó a adquirir una serie de cosas útiles en la vida que yo no conocía, por ejemplo, compenetrarme con los sentimientos de una persona”.

*Director del Centro de Investigaciones Históricas y Sociales del municipio Alberto Adriani.